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“…a todos
os que querem
e amam
o futebol!”*
“¡para todos los que quieren y aman el futbol!” dijera con sobresaliente dicción y lleno de entusiasmo el estimado sr. ángel fernández (1925-2006) (excelente cronista mexicano)
[para todas las voces del mundial]
hola, buen día,
las inauguraciones de los mundiales de futbol son altamente emotivas
(y la motivación es uno de los nombres artísticos de la fe)
emanan algo que sobrepasa cualquier descripción
hay un momento de tal alegría que una vez más las palabras se fracturan
y este instante, nos invita a elevarnos a la hermandad, y luego hacia la indescriptible unificación,
millones de actores humanos reunidos, sin preguntarnos casi nada
{¿ya para qué?… estamos ahí porque se tiene el anhelo, se realiza un esfuerzo, trabajo, se conocen los límites de espacio y tiempo, se paga un boleto (o alguien lo paga), se conecta a un medio, se recibe información, se han estudiado o escuchado algunas de sus 17 reglas, se recuerda nuestra niñez, momentos jóvenes, vidas pasadas …estamos ya listos… }
hombres y mujeres, niños y adultos (léase: la humanidad/una parte importante) todos incluidos (en “el juego del hombre” como conceptualizó el balompié el sr. ángel fernández)
juntos una vez más, en estado de espera, suplicando internamente por las necesidades personales y de grupo, a punto de estallar de emoción, con deseos de abrazar al prójimo, en la confianza que hoy y mañana están unidos, algunos ya con temblor y las contagiosas lágrimas brotando …
es una fractura emocional que permite intuir la unificación, un instante que deja escapar chispas espirituales, destellos que desean transferir toda la emoción a su elevado destino (objetivo)
este estado de conciencia (este instante puro con algunas réplicas sinceras), es tan solo una muestra minúscula de la paz completa, esa etapa de la humanidad entera que nuestra alma anhela y que maestros y profetas aseguran vamos a llegar,
un tiempo de conciencia amplia (al cual podemos arribar vía: aumentando› la ayuda, caridad, estudio, … … …) donde dicen no hay espectadores, solamente jugadores,
todos participantes al subir al estadio de la conciencia elevada
[mientras tanto, en el nivel del terreno de juego {en el mundo del balón, los pies y pocas manos} es bueno respetar al árbitro, no burlarse de los compañeros, y tener cuidado con elprójimotuyo de camiseta contraria, cuidado]
que este instante muestra sirva de elevador para saber transferir el anhelo y el adecuado conocimiento espiritual hacia una vida mejor (para todos) y luego, hacia la paz completa
¡con fe y alegría!
(ahora en portugués plus: ¡com muita fé e alegria!)
jaime kurt
*traducción: julio cezar rezende … ¡gracias!
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Es muy sencillo.
Gracias.
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