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{disculpe, por favor ¿cómo llego a la chandeleur des canards? (la candelaria de los patos) }
hola, buen día,
en todo viaje, de lo más valioso es saber casi con exactitud a dónde ir,
una vez que se sabe a dónde, el reto se transporta a ¡cómo llegar ahí!
y este reto se magnifica si estás en un país extranjero, un espacio que no conoces, o simplemente si estás debutando en el trayecto
los viajes son fascinantes /… son siempre importantes,
trasladarse de un lado a otro ofrece varias oportunidades espirituales, algunas muy claras, otras escondidas (guardadas)
todo traslado es una experiencia, como el viajar por metro (o por tube como dicen los amigos ingleses)
en estos trayectos ocurren cosas extraordinarias
se ofrecen una gran variedad de pensamientos, desde los divertidos y aparentemente superficiales hasta los serios y profundos, elevados, sublimes …
como el de hacerme sentir que viajo por otra ciudad (recordatorio simple de lo transitorio)
el trayecto me transporta a diferentes partes del mundo, de la historia, de mi vida,
cada uno invita a trasladarse a pensar, recordar, rectificar, traducir, interpretar,
por ejemplo “¿cómo se llamaría esta estación si estuviera en parís?”
“tal vez: la chandeleur des canards”
y pensarlo trae ¡alegría!
(además de calma, pues con este dato ya puedes pedir ayuda)
(aconsejan los sabios que incluso es bueno hacer tonterías que produzcan alegría con tal de obtenerla y desde ahí alzarse hacia logros espirituales más elevados)
(la alegría siempre es buena)
(…)
en cada trayecto me acuerdo mucho de mis amigos, sonrío de sus ocurrencias, pienso en hablarles, escribirles, desearles lo mejor, contarles lo acontecido, abrazarlos con mis letras,
y al transitar por cada una de las estaciones, sus símbolos revelan parte de los secretos de su historia, su origen, sus visitantes,
solamente con su nombre se puede intuir gran parte de su vida, (pues el nombre es la esencia de su historia)
cada estación es un mundo completo, con su atmósfera y habitantes, turistas, hombres y mujeres de trabajo, negocios, leyes, comerciantes, estudiantes,
personas quienes atraviesan por severidades físicas, económicas, de salud, educación,
se unen la mano de quien pide y la mano de quien abre su abundancia,
hay pláticas y silencios, músicos interpretando sus canciones, sonidos particulares en cada estación, olores singulares …
¡la música siempre está presente en estos viajes!
(…)
recientemente he tenido como estación destino una terminal en la ciudad de méxico: candelaria,
su símbolo es un patito {en la ciudad de méxico cada estación del metro tiene un símbolo}
esta estación se encuentra enclavada en la colonia “candelaria de los patos”, donde abundaban en un tiempo estas aves viajeras por excelencia, las cuales generalmente migran y retornan,
los patos, solían habitar y visitar las orillas del lago de texcoco
(¡qué maravilla ha de haber sido este escenario!)
[no dejo de agradecer al Creador y a los fundadores de méxico-tenochtitlán el acierto de asentarse hace cerca de 700 años, en este bello lugar de clima extraordinario y en el cual –dice la tradición- los recién llegados observaron “…una águila devorando una serpiente…” motivo espiritual que funda la ciudad y causa este hermoso país]
[el lector espiritual relacionado con los profetas y la biblia puede identificar los poderosos conceptos del motivo de la fundación de méxico-tenochtitlán: águila, devorar, serpiente (…) y no solamente se puede percibir un lenguaje espiritual familiar del pasado de hace más de 700 años, o de 2,500 años, sino podemos reconocer que “…una águila devorando una serpiente…” pertenece igualmente al futuro, es decir al lenguaje del gran día, el gran día que todos anhelamos,
¿la fundación de esta hermosa ciudad llena de maravillas, tiene que ver con el gran día?
percibo que sí,
“…una águila devorando una serpiente…”
es una variación espiritual de la misma profecía,
… ¡todo viene del Creador!
{pero es mejor descender y seguir observando las estaciones}]
(…)
cada nombre de la estaciones del metro nos ayuda a ampliar la información histórica, sea de aquí o de nueva york, londres o parís :
“place de la concorde” “montparnasse” “notre-dame de lorette”; “leicester square” “victoria” “green park”; “penn station” “42nd street” “72nd street”; “chapultepec” “merced” “candelaria” …
cada estación es un mundo completo, como las estaciones de nuestra vida,
los capítulos de nuestra biografía están todos conectados por el hilo de nuestro trayecto y deseo motriz,
y las estaciones, siempre nos conectan a otras (tal vez el tipo de vehículo cambie, atención)
(…)
los viajes en general, los trayectos en metro, las estaciones y sus mundos nos recuerdan constantemente grandes enseñanzas espirituales
una de las primeras es no olvidar nunca la estación en donde hay que descender
es parte esencial
y esta estación está íntimamente ligada a la misión del viaje
es decir, si estás ahí en este maravilloso trayecto, hay una misión a cumplir y una estación destino, ahí hay que descender, cumplir la misión, ascender y retornar,
entonces, también es bueno recordar hacia dónde vamos de regreso
(…)
para los viajeros primerizos así como para usuarios expertos del metro, una serie de sugerencias simples y prácticas: estudia tu mapa siempre, asesórate, recuerda a donde tienes que ir (mantente alegre), si estás en tierra extranjera recuerda el nombre en ese idioma, pide ayuda (¡gracias!), baja y sube con cuidado, cumple tu misión, regresa con bien,
o como dijeran con afecto nuestros papás, seres cercanos, los buenos amigos: “aquí te espero de regreso”
el mapa, la alegría, la música, la fe, la certeza de ir y retornar, aligeran el viaje
también lo facilita recordar que el Creador es Uno
¡un feliz trayecto!
jaime kurt
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